A partir de ahora toda nueva construcción y gran rehabilitación deberá destinar el 30% a vivienda protegida
El 23 de febrero la PAH de Barcelona, el Observatorio DESC, la ABTS, la FAVB y el Sindicat de Llogaters i Llogateres presentamos en el pleno del Ayuntamiento de Barcelona una moción para ampliar el parque de vivienda asequible que se aprobó por unanimidad. Hace dos meses, después de un intenso proceso de trabajo con los grupos municipales y los servicios técnicos municipales, el mismo Pleno aprobó con el apoyo del 80% de los concejales ‒todos los grupos municipales menos el PP y Ciudadanos‒ la modificación del Plan General Metropolitano para incluir vivienda asequible en las nuevas construcciones y grandes rehabilitaciones de toda la ciudad ya consolidada. Tras superar esta fase compleja y decisiva, y aunque el 30% ya era prácticamente una realidad, faltaba que la Generalitat lo aprobara definitivamente. Lo que parecía un sencillo trámite de validación ha resultado mucho más complicado, con hasta tres reuniones de trabajo previas, con el fin de activar de manera definitiva esta innovadora medida. Las entidades impulsoras hemos seguido el proceso en primera línea, procurando garantizar que el 30% no se atascase.
Hoy, miércoles 5 de diciembre de 2018, por fin podremos celebrar su aprobación definitiva en la Subcomisión de Urbanismo Generalitat-Ayuntamiento. El grupo promotor de la medida hemos defendido en todo momento que la Generalitat avale y apruebe inmediatamente el 30% sin modificar el texto que ya estaba aprobado por el Pleno de Barcelona. Ante los mencionados retrasos, hemos exigido públicamente que se desbloqueara su aprobación definitiva con urgencia y al más alto nivel, ya que el 30% es una gran oportunidad en materia de vivienda.
Respondiendo a esta llamada y al trabajo incansable de la ciudadanía, hoy podemos decir bien alto y orgullosas de la lucha que hay detrás, que ya tenemos el 30% en Barcelona y que ha venido para quedarse y extenderse. Numerosos son los municipios metropolitanos y de más allá que están trabajando en medidas similares: desde las entidades sociales animamos a seguir este camino y próximamente acompañaremos la extensión imparable del 30% en toda Cataluña.
Desde el grupo de entidades promotoras del 30% queremos expresar hoy nuestra inmensa alegría. De ahora en adelante, los edificios de más de 600 m² situados en suelo urbano consolidado y de obra nueva o de grandes rehabilitaciones, deberán poner el 30% de sus viviendas a precios asequibles, por debajo de los de mercado. Estamos hablando de ganar unas 400 viviendas protegidas al año: si el 30% se hubiera aplicado desde que es posible (2007) hoy tendríamos 4.000 viviendas protegidas más en la ciudad y 20.000 más en el área metopolitana. Imaginemos la aportación que podrá significar dentro de 30 años. Asimismo, no podemos obviar que esta aprobación se debería haber producido hace semanas, pero una vez más los ritmos de las administraciones no están a la altura de las necesidades sociales, y la Generalitat se ha mirado con lupa el sistema de transitoriedad de la medida, retrasándola. Cabe destacar la gravedad de la situación, porque durante este tiempo han continuado entrando cientos de peticiones de licencias de obras que eludirán el 30%, problema que queríamos evitar con la suspensión de licencias, pero que varios partidos rechazaron en la aprobación inicial.
La aprobación definitiva del 30% es un punto de inflexión, ya que es la primera vez que se aplica en Cataluña esta previsión de la Ley del derecho a la vivienda, que supone un verdadero cambio de paradigma en el urbanismo a nivel estatal. Hasta ahora la vivienda protegida solo se podía situar en nuevas zonas de crecimiento, fuera de la ciudad (suelo urbanizable) o en zonas de grandes transformaciones internas (suelo urbano no consolidado, como el 22@ o la Sagrera), por lo tanto, en la ciudad construida era prácticamente imposible incluirla. Con el 30% podemos distribuir vivienda por debajo del precio de mercado y favorecer la cohesión urbana (los criterios de acceso a la vivienda protegida son extensibles al 75% de la población), igualando a las experiencias europeas más avanzadas. Ciudades como París o Viena ya aplican medidas similares, y por ello el parque de vivienda asequible es del 20%, cuando en Barcelona y en el resto de Cataluña es del 1,5%.
Esta importante conquista por el derecho a la vivienda ha sido posible gracias a la lucha tenaz de las entidades sociales. En febrero llevamos la medida al Pleno en forma de moción, consiguiendo en los meses posteriores que la medida avanzara, superando los obstáculos y venciendo la inmensa presión que han ejercido los lobbies y los grandes poderes económicos inmobiliarios. Avisamos desde ya a quienes han tratado de tumbar la medida del 30% que no vamos a permitir que nuevas presiones o recursos a los tribunales boicoteen este avance tan importante por el derecho a la vivienda.
Reiteramos la importancia de que la Generalitat vaya más allá y cumpla lo que ha anunciado públicamente, modificando la ley para que las viviendas protegidas no se puedan descalificar y vender, así como permitiendo que las viviendas resultado del 30% sean de alquiler y no de venta. Solo en Barcelona tendríamos unas 200.000 viviendas protegidas (40% del parque) si no se hubieran vendido. También recordamos que esta medida por sí sola no resuelve el problema de la vivienda en nuestras ciudades, y por tanto habrá que hacer muchos más cambios valientes, en favor de la gente y no de los especuladores. Además de dar respuestas urgentes a los desahucios, acabar con las causas de la emergencia habitacional crónica que padecemos desde el estallido de la crisis y pinchar la burbuja del alquiler, la gentrificación y la expulsión de vecinas, no conseguiremos acabar con el problema de la vivienda si no damos pasos decididos para aumentar el parque de vivienda asequible. No podemos permitir que la creación del parque protegido dependa únicamente de los presupuestos públicos, porque así no llegaríamos nunca a los niveles que necesitamos: es imprescindible que el sector privado empiece a asumir responsabilidades para resolver un problema que los implica, ya que obtienen enormes beneficios a partir de nuestros barrios y ciudades, con enormes consecuencias sobre la vida de las personas.
Finalmente, queremos dar las gracias a toda Barcelona por seguir a pie de calle: exigiendo responsabilidades a aquellos que, con tal de lucrarse, pretenden expulsarnos de nuestras casas y barrios, o asfixiarnos con precios inasumibles.
¡Seguimos! ¡Por el derecho a la vivienda! # JaTenimEl30 # Hola30x100