La mañana del 14 de junio de 2018 la prensa se hacía eco de una nueva vida arrebatada por un sistema criminal promovido por la banca
Un hombre de 45 años ha muerto a manos del sistema bancario y de la legislación criminal en materia de vivienda en este país. Tenía que ser desahuciado porque no podía hacer frente al pago del alquiler de su vivienda al Banco Popular. Una vivienda recientemente adquirida por el fondo buitre Blackstone. Precisamente, este indignante suceso ha ocurrido el mismo día que la PAH arrancábamos una nueva campaña internacional contra estos carroñeros.
La víctima se enfrentaba a su segundo desahucio, pero justo hoy, cuando una comitiva judicial acompañada de agentes de los Mossos d’Esquadra iba a desalojar a la familia de la vivienda, situada en la décima planta del bloque, ha decidido poner fin a su vida, fruto de la desesperación.
La familia era usuaria de Servicios Sociales y se encontraba a la espera de recibir ayudas de la Administración que nunca llegaron, lo que rompió su esperanza. Y hay muchas esperanzas a punto de quebrar, al borde de un suicidio, que en realidad es un asesinato. Los bancos que le han matado no lo son, pero su avaricia les priva de sentimientos. Y ahora, todos (Servicios Sociales, bancos, justicia…) lanzarán pelotas fuera.
Desde la PAH exigimos medidas urgentes que rescaten estas esperanzas y acaben con tanta injusticia, con tanto sufrimiento, con tanta muerte.
En su memoria y en la de todas las personas asesinadas previamente, para impedir que vuelva a pasar, desde la PAH hacemos un llamamiento a concentrarnos mañana a las 12, frente a las puertas del Banco Popular, con unas exigencias bien claras y que llevamos planteando hace años:
Moratoria indefinida de los desahucios a familias en situación de exclusión y vulnerabilidad social.
Que el Gobierno de Pedro Sánchez retire de inmediato todos los recursos a las leyes de vivienda autonómicas, pendientes en el TC.
Que se tramite y apruebe de forma urgente la Ley de Vivienda de la PAH, la única que recoge todos los mecanismos para acabar de una vez por todas con la usura de los bancos, la especulación con nuestros derechos más fundamentales, y conseguir que en este país podamos decir que tenemos una ley que garantiza el derecho a la vivienda para todas sin excepción.
¡No es un lema, es una realidad! Hay vidas en juego y ha llegado el momento de poner una solución, para evitar que continúen segándose.
#StopDesahuciosCriminales